La próxima crisis económica podría estar mucho más cerca de lo que vaticinan algunos especialistas e, incluso, superaría en dureza a su antecesora de 2007. Estos son cinco indicios que prueban la afirmación anterior.
Un primer elemento que ha sido pasado por alto por varios especialistas es que el Gobierno de Estados Unidos ha colocado en su centro de atención las cuentas de las personas retiradas. La estrategia no es nueva, ya que fue utilizada previamente por Portugal en 2010, que tomó dinero de los jubilados para llenar agujeros en el déficit gubernamental y pagar su deuda. Luego, Francia e Irlanda hicieron lo mismo en 2011 y Polonia en 2013. Desde 2011, el Departamento del Tesoro ha tomado, al menos en cuatro ocasiones, fondos de las pensiones para cubrir déficits en los gastos federales. Para el billonario Jim Rogers, el próximo paso de Washington será contra las cuentas privadas de los ciudadanos estadounidenses.
Otro elemento preocupante es que los cinco bancos más importantes de Estados Unidos son ahora mucho más grandes que durante la crisis de 2007. Supuestamente los legisladores y reguladores iban a adoptar medidas para impedir que el sistema financiero del país estuviera atado a estos cinco bancos, para así ganar en estabilidad; sin embargo, la realidad fue completamente diferente. Estos cinco bancos terminaron absorbiendo a los bancos pequeños que cayeron en bancarrota, por lo que en estos momentos son todavía más importantes para el sistema. Si alguno de ellos cayera, a partir de malas prácticas bancarias, entonces el resultado sería terrible.
Las tasas de interés de Estados Unidos están en niveles muy bajos, por lo cual la Reserva Federal tiene pocas opciones de cortar esas tasas. El año pasado, la Reserva aumentó un poco dichas tasas, pero los fondos siguen rondando el rango de ¼ a un ½. Cuando estalló la anterior crisis, en agosto de 2007, las tasas de interés de los fondos federales estaban en el 5,25%. Por tanto, en la próxima crisis, la Reserva tendrá menos de medio punto porcentual para reducir las tasas y así estimular la economía.
¿Los bancos USA son menos seguros?
Además, un detalle que siempre debe tenerse en cuenta es que los bancos estadounidenses ya no son seguros para guardar dinero en ellos. De acuerdo con la revista Finanzas Globales, entre los 50 bancos más seguros del mundo, solo cinco son estadounidenses, siendo el JP Morgan Chase el mayor del mundo. La FDIC tuvo que admitir que le faltaban reservas para cubrir otra crisis bancaria. Según el último reporte de esta organización, no cuentan con reservas para asegurar los depósitos bancarios de estadounidenses por los próximos cinco años. Esto significa que solo pueden cubrir un 1,01% de los depósitos guardados en bancos de Estados Unidos. En otras palabras, únicamente cubren 1 de cada 100 dólares depositados en las cuentas.
Para completar el complicado escenario y contrario a lo que asegura constantemente el presidente Donald Trump, las empresas estadounidenses continúan quebrando en cifra récord. Desde 2016, el CEO de Gallup, Jim Clifton, ha venido explicando que las empresas estadounidenses quiebran más que las startups, una tendencia apreciable por primera vez en más de tres décadas. El decaimiento de los pequeños y medianos negocios tiene muchas implicaciones para la economía. Además, ni siquiera las grandes empresas quedan inmunes ante este problema. Por ejemplo, Microsoft ha despedido a casi 20 mil trabajadores; mientras, McDonald´s se ha visto forzado a cerrar más de 700 establecimientos.
Estos indicios muestran que la siguiente crisis económica no está tan lejana y la economía, no solo de Estados Unidos, parece estar menos preparada para enfrentarla.
¿Necesita una consulta sobre como invertir en mercados emergentes?