Tres años después de sacar a Panamá de la lista negra de paraísos fiscales, la Unión Europea decidió colocar nuevamente a ese país en el listado de jurisdicciones opacas, porque consideró que no había cumplido con las reformas fiscales a las que se comprometió. Según los expertos Panamá sigue siendo la mejor opción como jurisdicción offshore para sociedades y residencia fiscal.
Los Ministros de Finanzas de la UE también añadieron a la lista negra a otras tres jurisdicciones junto a Panamá: Islas Caimán, Seychelles y Palaos. Ahora, este listado está compuesto por 12 territorios, entre los que aparecen Samoa, Guam y las islas Vírgenes Americanas.
El Gobierno de Panamá de inmediato protestó por la decisión y la consideró totalmente injusta. El reingreso de Panamá a la lista negra de paraísos fiscales no provocará sanciones; pero sí entrarán en vigor restricciones de transacciones con entidades radicadas en cualquiera de los 27 países miembros de la Unión Europea.
Además, la Unión Europea actualizó su denominada “lista gris” y la redujo a solo 12 países. Aquellos que se mantienen son los que están comprometidos a efectuar cambios en sus leyes para adecuarlas a las exigencias de la comunidad europea. Esta “lista gris” está compuesta por Turquía, Anguila, Botsuana, Bosnia Herzegovina, Eswatini (Suazilandia), Jordania, Maldivas, Mongolia, Namibia y Tailandia. Mientras, Marruecos, Australia, Santa Lucía, Namibia y Jordania tendrán que transformar sus regímenes fiscales, considerados por la Unión Europea como “dañinos”.