El invierno se acerca y sin el gas ruso las cosas se van a poner feas. Con esto aumenta la preocupación sobre cómo se las arreglará el llamado “Viejo continente” para asegurar calefacción, sin el gas de su principal proveedor histórico. Rusia entregó, en 2021, el 40% del gas que consumieron los europeos.
Si me llamas te contaré el secreto mejor guardado por el Occidente
- Un país donde hace calor todo el año;
- Una isla que es puerto franco y hay todos los productos importados a precios razonables;
- Alquileres de 2 cuartos y piscina desde 250 dólares;
- La gasolina a 50 centavos;
- No pagas la electricidad … y mucho más.
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Lo peor está por llegar
La Unión Europea reconoció, tres meses atrás, que en el plazo de un año reduciría las importaciones de gas ruso. Para lograr esto puso en práctica dos estrategias: firmar acuerdos con otros productores y apostar por el arribo de gas licuado (GNL) mediante barcos. Ninguna de las dos parece estar funcionando.
Varios políticos europeos han pedido a sus ciudadanos que reduzcan el consumo de electricidad. El primer ministro Mario Draghi incluso llegó a decir que si los italianos preferían aire acondicionado encendido o la paz. Italia es un el segundo mayor comprador europeo de gas ruso.
Solo Alemania compra más. El canciller de ese país, Olaf Scholz, ya advirtió que los germanos deberían prepararse para un corte total de los envíos de gas procedentes de Rusia. Ante esto, los precios de la electricidad se han disparado.
Mientras, Rusia ha respondido con más restricciones. El presidente Vladimir Putin golpea donde más duele y esto muchos lo consideran un “chantaje”. En la actualidad ya no envía gas a Bulgaria, Finlandia, Polonia y Francia. Además, redujo notablemente el flujo a Italia, Austria y Alemania.
¿Que precio estás dispuesto a pagar por guerras ajenas?
Putin exigió a los llamados “países extranjeros no amistosos” que paguen el gas en rublos. Para ello deben abrir cuentas en bancos rusos, desde donde se hace la conversión a rublos. Aquellos que no aceptan esto, Moscú les corta el suministro.
Por ahora estos cortes no se han sentido tanto, porque es verano. El problema será cuando llegue el invierno y sea necesario encender la calefacción.
El mercado del GNL sí ha seguido creciendo. Corea del Sur, Japón y China han sido los mayores importadores. Pero esto podría cambiar, ya que los países europeos se han lanzado a realizar compras masivas del GNL. El resultado ha sido escasez de oferta y mayores precios.
El gran ganador de este caótico escenario ha sido el principal instigador de las sanciones contra Rusia: Estados Unidos. Mientras Biden aboga por más sanciones y hace envíos millonarios de armas a Ucrania, las empresas estadounidenses han aumentado las exportaciones de GNL.
Los expertos esperan que, antes de que concluya 2022, Estados Unidos se conviertan en el mayor productor de GNL del mundo.
