Una cartera electrónica suele ofrecer diferentes tipos de cuentas y otros tipos de servicios: puede solicitar una tarjeta de crédito, recuperar cuentas bancarias o enviar dinero con Western Union o MoneyGram.
En comparación con un banco, la cartera electrónica tiene la ventaja de que no tiene los mismos controles, aunque las tasas son más altas. Las tarifas y los servicios dependen del objetivo deseado de los clientes.
Una cartera electrónica tiene una licencia para recibir y hacer pagos en línea. Con esta licencia, puede abrir varias cuentas corresponsales en varios bancos.
La inversión total estimada es de aproximadamente 50.000 euros, incluyendo la apertura de la empresa, de la cuenta bancaria (al menos 4) y el desarrollo del sitio web, con todos los sistemas de seguridad, incluyendo "banca online o transacciones online". El resto de la inversión se divide en gastos de puesta en marcha, publicidad, etc. Por supuesto, también sirve un capital de vuelta por un valor aproximado de 100.000 Euros.
Si desea abrir su propio monedero electrónico, póngase en contacto con nosotros para evaluar las distintas opciones y costos relacionados.